Lucio en la niebla

Hola a todos/as, y bienvenidos a mi blog, empezamos!!!!

Seis de la mañana, y suena el despertador, nos vamos de pesca!!, esta vez volvemos al pantano a dedicar otra jornada a los lucios.

Me pongo en camino con mi coche y mucho antes de llegar, veo que hay mucha niebla y estaba justamente por la parte del pantano. Faltando poco para llegar, me  meto de lleno en la niebla y no se veía nada de nada, así que tuve que reducir la velocidad del coche e ir muy despacio porque la niebla era muy densa.
Aparcamos y nos ponemos en camino al sitio elegido y qué paisaje me brinda la naturaleza.........

Espectacular el paisaje, con la niebla cubriéndolo todo y los árboles cargados de agua.....

Estaba disfrutando del paisaje y encima vamos a pescar, se puede pedir más?
No hacía nada de aire y el agua estaba que parecía un espejo, que se vio alterada por el nadar de los patos.

Llevaba poco tiempo pescando, y dejaba caer el señuelo hasta el fondo, recogiendo lentito con tirones y paradas, llevaba tres o cuatro lances, ya tenía el señuelo casi fuera y cuando lo veo de venir, lo paro. Cuál es mi sorpresa que aparece un lucio y lo muerde, pero no se engancha!!!
Veo que no se va y sigue allí, le dejo el señuelo parado delante suya y está totalmente quieto. Le muevo el señuelo un poco y hace un amago de ataque pero nada, y él sigue ahí, no se va, se lo vuelvo a mover dando dos pequeños tirones para un lado, se acerca con más velocidad y zas!! Muerde el señuelo y se va para el fondo con mucha velocidad.

Tengo la sacadera preparada a mi lado y el lucio me ofrece una bonita lucha. Cuando se empieza a cansar lo voy subiendo poco a poco y para fuera. Un bonito lucio había acabado en mi sacadera. Le hago las fotitos de rigor y lo vuelvo a soltar al agua, siempre captura y suelta.

Contento con la captura, seguimos pescando y a la vez disfrutando del paisaje , ya que la niebla estuvo presente gran parte de la mañana.

Llevaba bastante tiempo en el mismo sitio y no tenía más picadas, así que decido cambiar de sitio a probar suerte.

Andamos entre los pinos y la niebla, y llego al sitio, lanzo una y otra vez y nada, cambio de señuelo y pruebo y nada de nada.
Ya llevaba un buen rato que no tenía picadas y era las una del mediodía, hora perfecta para recoger e irme.

No tuve más picadas, pero me voy contento por pillar un luciete, y por el magnífico día que pude disfrutar con la niebla inclusive, la pesca es también disfrutar de todo lo que te rodea.

Me despido de todos/as y hasta la próxima, que espero que sea pronto,  os dejo una foto que la hice por probar y al final me ha salido una fotaca!!, hasta la próxima.